Esta receta la hice el mes pasado y al final se me quedó traspapelada sin publicar, aunque os pongo la receta desde cero, yo suelo utilizar unas que ya vienen cocidas y que salen muy buenas, yo aprovecho y la compro en Francia cuando nos damos una vueltecilla por allí.
12 gambas
400 gr. de alubias verdinas
1 diente de ajo
1 puerro
1 puerro
1 hoja de laurel
1 zanahoria
1 cebolleta
pimentón
aceite
sal
pimentón
aceite
sal
caldo de marisco o de pescado de roca
La noche anterior a preparar este plato dejar las verdinas en remojo para cocinarlas a la mañana siguiente.
Picar en trozos pequeños el puerro, el diente de ajo, la cebolleta y la zanahoria, pocharlos a fuego lento con aceite de oliva hasta que las verduras estén tiernas. Añadir las verdinas bien escurridas a la cazuela.
Rehogar el conjunto un par de minutos y añadir caldo suficiente para cubrirlas y un poco más, dejando que cuezan a fuego lento durante unas 2 horas o el tiempo suficiente para que estén tiernas.
Lo ideal es mantener la cocción de forma muy lenta, añadiendo más agua o caldo -siempre en frío- si fuera necesario porque se quedara sin líquido. De vez en cuando remover con cuidado e ir probando hasta que estén en su punto.
Para que el caldo tenga un profundo e intenso sabor a marisco, se puede usar caldo de pescado de roca o caldo casero hecho con las cáscaras de langostinos, gambas, etc que hayamos ido guardando. Yo siempre tengo en el congelador.
Para terminar, hacer a la plancha las gambas, -será suficiente con un par de minutos por cada lado- y servirlas.
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