Hace unos días mi hija le hizo una tarta de fondant a una amiga para su cumpleaños, y al recortar los bizcochos para que salieran todas las capas iguales le quedaron muchos recortes, y como le daba pena tirarlos, se los trajo a casa (iban a comer con nosotros antes de irse al cumpleaños) junto con la tarta que quería acabar de decorar en casa, ya que en la suya no le había dado tiempo, así que mientra se hacía la comida nos dedicamos al tema reposteril y estuvimos haciendo estos cake pops.
Ya había hecho unas trufas con una técnica parecida pero con más ingredientes, así que esta receta la encuentro genial, ya que es mucho más sencilla de hacer.
Ya había hecho unas trufas con una técnica parecida pero con más ingredientes, así que esta receta la encuentro genial, ya que es mucho más sencilla de hacer.
Se los dedico a mi mami, ya que hoy domingo celebra su santo.
INGREDIENTES:
200 gr. de bizcocho al gusto o restos de bizcocho o magdalenas que se os hayan quedado secas
100 gr de queso crema tipo philadelphia (yo le he puesto light)
chocolate para fundir (yo o he puesto sin azúcar)
Palitos de chupa chups o brochetas
Se puede utilizar el bizcocho que nos guste, o magdalenas, o incluso galletas, incluso comprar un bizcocho hecho.
Hay quien utiliza leche condensada, mantequilla, mascarpone, pero nosotras hemos utilizado queso de untar light para amalgamar las migas del bizcocho ya que parece que así es menos pecado , así no queda excesivamente empalagoso y le da un sabor muy bueno.
Deshacer el bizcocho y mezclarlo con el queso. Si tenéis Thermomix o una picadora, se puede poner las dos cosas juntas y con un par de toques estará listo.
Una vez la masa mezclada, coger con una cucharilla un poco de esta masa y con las manos formar una bolita, que no sea excesivamente grande, tamaño bocado. Poner todas estas bolitas en una bandeja o en un plato que quepa en el congelador. Dejarlas en el congelador unos 15 minutos.
Poner el chocolate en un cuenco y fundirlo en el microondas, lo mejor es hacerlo a potencia media, poco a poco para evitar que se nos queme. Debe quedar con una consistencia bastante líquida.
Sacar las bolitas del congelador. Meter la punta de nuestro palito en el chocolate fundido y mojarla bien. Introducir esta punta en la parte central de la bolita, sin llegar al fondo, pero si bien hundida para que no se suiciden las bolitas. Este paso es muy importante porque evitará que al mojar las bolitas en el chocolate no nos quedemos con el palito en una mano y el bizcocho flotando en el chocolate...
Repetir la operación hasta hacerlo con todas.
Si tardas mucho en hacer esto y el chocolate se ha solidificado o enfriado demasiado y las bolitas de bizcocho están blandas, volver a meterlas en el congelador unos 10 minutos y volver a fundir el chocolate de nuevo a media potencia en el microondas.
Introducimos la bolita en el chocolate fundidos y cubrirla entera, dar golpecitos muy suaves en el borde del cuenco para eliminar el exceso de chocolate e ir girándolo hasta que ya no gotee, no debe quedar con una capa excesivamente gruesa, pero tampoco debe quedar ninguna parte sin cubrir.
Si se van a adornar con fideos de colores, o figuritas de azúcar de colores es el momento, hay poner la decoración antes de que se seque, ya que se secan muy rápido.
Ahora sólo nos queda dejarlos de pie, en un vaso con sal o arroz para que se sostengan bien...o pincharlos en un corcho o esponja de la de las flores cubierta con papel aluminio.
Fuente: Bakerella, tiene libros publicados sobre el tema.
3 comentarios:
Es una buena forma de aprovechar los restos de bizcochos, te han quedado muy bonitos!!
besos,
chulisimos y deliciosos
Yo también suelo aprovechar los recortes de las tartas para hacer cake pops, son una idea genial! Sacan una pinta genial! enhorabuena!
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