Llevo un par de semanas experimentado para obtener un bizcocho sin gluten, sin lácteos y sin huevo, menos mal que no había que eliminar los frutos secos, por eso me ha apetecido añadirlos, porque creo que cuantas mas variedades de harinas se añadan a la mezcla más posibilidades habrá de que no se reseque resquebraje o hunda.
Primero probé solo con harina de arroz y Maicena, pero se desmigaba demasiado; el tema de los huevos también es muy peliagudo, probé solo con plátano, solo con manzana, y mezclando ambos, peo quedaba demasiado pastoso, así que esta vez le he añadido las semillas de lino, para mejorar la textura, no es prefecto, porque se puede mejorar, pero es el que ha quedado mejor para mi gusto.
Ha pasado la prueba del día siguiente con nota, pues no se ha endurecido ni desmigado.
INGREDIENTES:
40 gr. de harina de garbanzo
40 gr. de maicena
40 gr. de harina de arroz
40 gr. de harina de almendras
40 gr. de fécula de patata.
100 gr. de azúcar de abedul (o 1 c/s de edulcorante líquido apto para cocinar)
1 plátano maduro
80 gr. de compota de manzana
1 sobre de levadura química
1 cucharadita de postre de sal de frutas
zumo y ralladura de 1/2 limón
15 gr. de semillas de lino molidas
200 ml de leche de almendras (u otra bebida vegetal)
Precalentar el horno a 180ºC.
Poner en un bol todos los ingredientes secos: harinas y levaduras
Mezclar las semillas de lino molidas con 50 ml de la bebida vegetal.
En otro bol chafar el plátano, añadir la compota de manzana, el azúcar y la mezcla de la leche y las semillas de lino.
Añadir la mezcla seca tamizada al bol de los líquidos y mezclar poco a poco.
Añadir el zumo y la ralladura de limón. Mezclar.
Si el molde no es de silicona, engrasar. Llenar el molde con la preparación y hornear unos 30 minutos. Vigilar porque cada horno es un mundo.
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