Esta tarta la he hecho para celebrar la vuelta a casa de mi padre después de 15 días en el hospital, como ya había hecho la de cuajada la semana anterior, y mi hermana quería probar la receta de La Viña, pues me he animado a hacerla, ya la había hecho la tarta de queso en otra ocasión pero más ligera
INGREDIENTES:
600 gr de queso crema
4 huevos grandes
300 ml de nata para montar, mínimo 35% materia grasa (debe estar bien fría, recién sacada de la nevera)
180 gr. de azúcar de abedul o 2 cucharadas soperas de edulcorante líquido apto para cocción
1 cucharada sopera rasa de maicena
Batir con unas varillas eléctricas, manuales o robot los ingredientes siguiendo orden:el queso con el azúcar o edulcorante, los huevos, la nata y la harina. No hace falta batir mucho solo hasta que la masa quede sin grumos.
Precalentar el horno a 200ºC con calor arriba y abajo (sin ventilador).
Arrugar el papel de horno y con él forrar el molde de unos 18-20 cm, si queremos que quede altito.
Verter la mezcla en el molde e introducirlo en el horno a media altura .
Hornear la tarta unos 40 minutos si se quiere con textura suelta o unos 50 minutos para que quede más compacta. Hay que vigilarla a partir de los 30 y si se está dorando demasiado por encima cubrirla con papel de aluminio y sigue horneándola.
Cuando esté lista, debe quedar algo temblorosa, sacar del horno y dejar que se enfríe lentamente, cuando esté completamente fría, unas 4-5 horas, meterla en la nevera y dejarla reposar de un día para otro.
NOTA: Yo la apagué y la deje que se enfriara completamente en el horno, y quedó un poco densa, así que mejor cuando se pueda manipular, dejarla enfriar a temperatura ambiente, antes de meterla en la nevera
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