TARTAR DE SALMÓN

 El otro día ya os puse un tartar de atún, que hice para la cena con mi hija, este fue otro de los platos que puse, ya que al ir a sacar el atún del congelador vi que me quedaba una porción de lomo de salmón solitario, y con un paquete de salmón marinado que tenía en la nevera (como me gusta tanto, me gusta tener siempre en la nevera) decidí hacer otro tartar, ya que la cena tenía que ser de proteínas y verduras (por el régimen), este también quedó buenísimo.

!!!Felicidades a todos los Pere y Pedro!!!

 INGREDIENTES:

200 gr. de salmón marinado o ahumado

130 gr. de salmón fresco

50 gr. de pepinillos

1 cebolleta pequeña fresca

1 cucharada de mostaza a la antigua

1 cucharada de mayonesa (queso crema 0%+mostaza +1 huevo duro)

salsa worcestershire, tabasco,y  pimienta al gusto

huevas de mujol

hojas de endibia

Quitar la piel del salmón fresco (si la lleva) y del marinado (si la lleva) o ahumado y picarlo finamente a cuchillo. Pelar y cortar la cebolla en un brunoise muy fino, haciendo lo mismo con los pepinillos.

En un bol, mezclar el salmón picado, los pepinillos, la cebolla, la mostaza a la antigua y remover bien todo el conjunto. A la mezcla añadir una cucharada de mayonesa unas gotas de salsa worcertershire y tabasco al gusto. Moler un poco de pimienta negra y remover todo de nuevo, hasta que quede mezcla homogénea.

 Enmoldar el tartar y servir con hojas de endibia y huevas de mujol.

Se podría adornar  también con cebollino picado, pepinillos y la mayonesa.

La salsa que añadimos para cohesionar el tartar no era auténtica mayonesa, ya que no lleva nada de aceite, mi hija me dijo la salsa que ella hacía para simular una mayonesa: hay que triturar un huevo duro con unos 200 gr de queso crema, una cucharadita de mostaza (sin azúcar) y un poquito de sal, triturar todo junto, si quedara muy espesa se puede añadir un chorrito de agua hasta obtener la consistencia deseada.

NOTA: El pescado hay que congelarlo siempre previamente antes de usarlo para consumirlo crudo (al igual que cuando lo preparamos para sushi). Con ello evitamos correr el riesgo de poder ingerir el Anisakis, o podemos comprarlo congelado directamente.