Una variante del tradicional ajoblanco, pero que resulta igual de refrescante. Los altramuces, son una buena fuente de proteínas, y minerales. Los altramuces también destacan por su aporte en hierro y calcio.
INGREDIENTES:
380 gr de altramuces lavados y escurridos
50 gr de miga de pan del día anterior (ó 1 cucharada sopera de salvado de avena en mi caso)
250 ml de agua
1 diente de ajo
Aceite virgen extra
Sal
Vinagre de Jerez o de manzana
Lavar los altramuces con agua para quitarles la salmuera, se puede hacer el día anterior y dejarlos en el agua, al día siguiente escurrirlos.
En el vaso de la batidora, poner los altramuces lavados y escurridos, el diente de ajo, la miga de pan (o salvado de avena) y un buen chorro de aceite. Añadir un chorrito de vinagre, un pellizco de sal y triturar todo junto.
Ir añadiendo el agua poco a poco, hasta obtener la textura deseada. Si queda muy líquido, añadir un poco más de miga de pan (o salvado). Rectificar si fuera necesario, de sal, aceite o vinagre. Refrigerar al menos 2 horas.
Para la guarnición: Quitar los rabitos a las uvas; partirlas por la mitad y quitar las semillas. Si se usa manzana, pelarla y trocearla a cuadraditos, rociarla con un poco de limón para que o ennegrezca, si es melón quitar la piel y semillas a un par de rodajas, trocearlas a cuadraditos.
Servir el ajoblanco en cuencos y colocar la fruta elegida en cada uno de ellos a modo de guarnición. Rociar con unas gotas de aceite.
Servir el ajoblanco en cuencos y colocar la fruta elegida en cada uno de ellos a modo de guarnición. Rociar con unas gotas de aceite.
Fuente: Recetín
1 comentario:
muy original y gustosa
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