He estado cogiendo moras de la morera que tenemos delante de casa, y aparte de comerlas tal cual he hecho una tarta de moras como en los viejos tiempos, el año pasado no pudo ser porque la morera la podaron totalmente y las moras no salen de las ramas nueva sino de las viejas, así que el año pasado las que hice fueron con moras silvestres recogidas en mis paseos matutinos.
INGREDIENTES:
Para la base:
75 gr. de harina de almendra
25 gr. de coco rallado
50 gr. de proteína sabor vainilla
50 gr. de mantequilla
10 gr. de eritritol (o el de tu elección)
1 c/c de extracto de vainilla
Para el relleno:
250 gr. de queso mascarpone
150 ml de nata para montar o crema fresca o
2 huevos
20 gr. de eritritol (o el de tu elección)
400 gr. de moras (u otro fruto rojo de tu elección)
Precalentar el horno a 180°C. Forrar el molde con papel de horno.
Derretir la mantequilla para la base y calentar hasta que desprenda un aroma a frutos secos, o directamente usar ghee. Esto le dará a la masa un sabor caramelizado.
Retirar del fuego o microondas y añadir la harina de almendras, el coco y la proteína, el edulcorante y la vainilla.
Mezclar hasta que se haga una masa uniforme, extender y presionar sobre la base y paredes del molde.
Hornear unos 8-10 minutos, hasta que la corteza se dore ligeramente. Reservar, dejar enfriar y mientras preparar el relleno.
Mezclar el queso, la nata, los huevos y el edulcorante elegido hasta obtener una masa homogénea.
Echar la mezcla sobre la base previamente horneada. Poner por encima las moras u otro fruto rojo (fresas, frambuesas, arándanos, ...) de tu elección.
Meter al horno y hornear durante 25-30 minutos.
Apagar el fuego y dejar enfriar en el horno. Retirar cuando se haya enfriado totalmente y colocarla en el refrigerador para que repose durante la noche, así los sabores se potenciaran.
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