VIAJE A CERDEÑA II

Ese mismo día, por la noche, aunque no teníamos excesiva gana, y llovía bastante, salimos a picar algo para cenar, nuestro primer intento, fue ir a otro de los restaurantes recomendados en la guía, pero estaba cerrado, con lo cual, tuvimos que improvisar, la calle donde nos alojábamos (Via Serdegna), es la calle con más número de restaurantes, por metro cuadrado, esta es la parte antigua de la ciudad muy cerca del puerto.

El restaurante elegido fue "Da Serafino"

Como no teníamos mucha hambre pedimos solo un plato y cada uno y para picotear entre todos, ensalada de tomate, aceitunas y creo que insalata di polpo, pues no me acordé de hacerle fotos, (por eso me gusta hacerle fotos a lo que comemos, porque ha pasado una semana y se olvidan los pequeños detalles, que también, tienen su importancia).

Uno de los platos elegidos fué "spaghetti vongole y bottariga", "vongole" son las almejas, hay otra variedad de almeja a la que llaman "arselle".

La "bottariga" o "bottarga", son las huevas de mujol desecadas, nada nuevo bajo el sol del Mediterraneo.

En Murcia "mi tierra natal", tambien se preparan las huevas de esa manera, aunque nos limitamos a ponerlas con unas "almendricas" de aperitivo.

Otros (2) de los platos de pasta elegidos fueron estos "espaghetti ai ricci", solo llevan la pulpa de los erizos de mar y perejil, con un sabor perfumado y suave, buenísimos.

A mí no me apetecía pasta, pues había comido arroz a mediodia, así que me decanté por "pescaito frito" o mejor dicho "fritto misto del golfo", los pescaitos y gambas muy jugosos, lo único que según que trozo comías estaba demasiado frito eran los calamares, pero no le puse ni limón, con lo que a mí me gusta.